Los Conciertos Históricos: Raúl Porchetto en el Teatro Coliseo. * Una noche inolvidable, junto a las ¨ Amistades Eternas ¨ del Rock Argentino *. 22 de Septiembre de 2016.

 

Raúl Porchetto brindó anoche en el Teatro Coliseo, un formidable concierto. Junto a su banda de hace años, repasó sus 45 años con la música con un notable repertorio de todas las épocas. Acompañado de grandes artistas como.. Juanse, Lito Vitale, Sandra Mihanovich, Willy Iturri, Palito Ortega entre otros. Y tuvo un cierre inolvidable cuando volvió la magia, en un puñado de canciones del legendario grupo PORSUIGIECO, con la presencia de: Maria Rosa Yorio, Nito Mestre, León Gieco y Charly Garcia.

Desde hace semanas se rumoreaba en el ambiente musical, que el show/celebración de Raúl Porchetto en el Teatro Coliseo, se iba a constituir en uno de los conciertos del año. No sólo por la obra del mercedino que es primordial en los 70s y 80s, sinó también que produciría un encuentro - parafraseando a Luis Alberto Spinetta- de una reunión de músicos y ¨amigos eternos¨ de toda la vida como los integrantes de PORSUIGIECO.

Una hermosa noche en la ciudad primaveral e ideal, hizo que varias generaciones se acercaran a este concierto en el que Porchetto se volvió a reencontrar con su púbico. Como presentador impensado Facundo Arana recreó con su saxo la melodía de ¨Sentado en el umbral de Dios¨ para luego dar al paso al inicio del concierto - mágico -. Allí la banda en pleno arrancó con dos perlas pop/rock del disco -Reina Madre- bien alta: ¨El poder del universo¨ y la bella ¨Ningún rey¨ primera vez escuchada en vivo por mí. Luego continuaron con la exquisita ¨Noche y día¨ gran clásico de Raúl de los 80s.

 

El arranque a todo ROCK: Raúl Porchetto y banda.

Raúl se presentó junto a los músicos que hace varios años lo acompañan: Fernando Scarcella en batería, Danilo Moschen y Dani Porchetto en teclados, los solos de guitarra -calientes- de Javier Torrecillas, el preciso bajo de Manuel Llosa, más los coros de Antonela Vinancia y su hija Ana Clara Porchetto. De su último disco ¨Dragones y Planetas¨ levantaron temperatura con ¨Hay Rock and Roll¨ más la balada ¨A la luz de una vela¨, para luego tocar en piano y fuera de programa, la hermosa ¨Siempre vas a estar, en mi cabeza¨ dedicada al gran Juan Alberto Badía, emoción genuina.

Encuentro de dos amigos: Willy Iturri y Raúl Porchetto.

-Sos la pelotita de este juego, un Metegol-

Para homenajear las canciones de un disco histórico como lo fue ¨Metegol¨ de 1980, Porchetto invitó entonces al gran baterista Willy Iturri, con quienes tocaron una versión bluseada de esa perla escondida que es: ¨Donde hay un cine¨ y el pop rock de la gran ¨Metegol¨ que hizo mover a todo el teatro de sus asientos! Para bajar de la emoción del reencuentro de dos grandes amigos, el cantante eligió ¨Cuando un hombre ama¨ del disco -El mundo puede mejorar- en una versión brillante y luego recordó a otro gran bajista -Santiago Fandiño- con la fenomenal versión de ¨Trenes Blancos¨.

Otro invitado se sumó a la fiesta: Lito Vitale para recrear por primera vez en un teatro la ¨Obertura¨ del álbum debut de Porchetto: -Cristo Rock- de 1972. Además hicieron juntos ¨Canción primera¨ una bella plegaria a Jesús que erizó mi piel al cantar...¨Yo nunca morí¨. Luego al piano, hizo su oración de amor a la virgen Maria, cantando ¨Tan grande es tu amor¨ redondeando un combo de canciones, de una belleza inusual hoy en día.

Por primera vez recibió como invitada a otra gran artista, para cantar junto a él: Sandra Mihanovich. Ambos hicieron una deliciosa versión de ¨Mercedes en silencio¨ dedicada a sus pagos.

 

Amigos son los amigos: Nito Mestre y Raúl Porchetto.

-Una hermosa persona, Un hermoso Artista-

Y otro amigo del alma, - me consta- es Nito Mestre, juntos hicieron una despojada y unplugged versión de ¨Sentado en el umbral de Dios¨ con sus voces en perfecta sincronía, casi los ángeles tocaron la tierra en este momento irrepetible de bello.

Tras recordar un poco la efímera historia de un grupo de culto que formó con Lalo de los Santos y Rubén Goldin , llamado -Reino de Munt- que también contó en sus filas con Frank Ojstersek y Gustavo Bazterrica, entre otros.

Del disco ¨Televisión¨ de 1981, esa placa que grabó con los GIT -al igual que con Metegol-, Pablo Guyot y Alfredo Toth, más el nombrado Willy Iturri, recreó con guitarra acústica ¨En el fondo del cielo¨ para invitar al escenario a sus hijos: Ana Clara y Dani en piano, y hacer una emocionante ¨Los cisnes no cantan cuando mueren¨ del disco Reina Madre de 1983.

Familia Canción: Ana Clara, Raúl y Dani Porchetto.

 

 Viva el Rey, -León Gieco-

Si hay alguien que estuvo siempre cerca del artista, ese ha sido sin dudas su tocayo: Raúl Antonio León Gieco. Uno de sus impulsores a que no deje la música, cuando ¨veía como la barca se alejaba¨, juntos hicieron una formidable versión del clásico del artista nacido en Cañada Rosquin: ¨Bajaste del norte¨ aunque en el momento me haya hecho acordar a otra página memorable del santafesino como aquella de ¨Viejo solo y borracho¨, luego cantaron la gran ¨Canción del Bicentenario¨ y cerraron con el enorme y vigente ¨Che pibe, vení votá ¨ recibiendo ambos una gran ovación.

El tiempo pasa, pero los amigos siempre unidos: León Gieco y Raúl.

 

Otra vez calmamos la adrenalina con las baladas ¨Así está en mi corazón¨ y la portentosa ¨Como un ángel¨ más la increíble ¨Nena sacáte la careta¨ con un invitado de lujo: Juanse!

Y el concierto vuelve a hacerse pop, con otra perla llamada ¨Me siento bien¨ donde el solo de guitarra de Torrecillas enfrentado a Porchetto, sacude cabezas. Pero el Rock no se acaba y la banda arremete con ese clásico enorme que es ¨Por honor y gloria¨ del enorme disco Reina Madre, con toda la platea cantando los coros. Hasta desembocar en el himno ¨Reina Madre¨ que es -simplemente una canción de amor, como tantas- y que me hizo nuevamente emocionarme hasta los ojos, aún recuerdo la guerra, mi pieza y mi mamá conmigo escuchando ese cassette tan adorado, palabras que difícilmente expliquen, lo que he vuelto a sentir en esos minutos.

Si había un invitado que nadie hubiese imaginado, ese es Palito Ortega, con quien hicieron una versión bastante desprolija de su gran hit ¨Bailando en las veredas¨ como un homenaje a su gran amigo Sandro, que fue sostenida por Raúl, -personalmente no me gustó la elección en la voz de tucumano, a quien se lo vió y escuchó perdido con la letra- graficando quizás la única nota agridulce del concierto. Telón.

 -  Viaje al túnel del tiempo: PORSUIGIECO.

Con el correr de los días, se terminó de confirmar que a este tributo a la obra musical de Porchetto, también asistiría: Charly Garcia. Y tras abrirse el telón, la ultima estrella- la más brillante- de la noche, alias -Say No More- estaba con sus largos dedos acompañando a Maria Rosa Yorio- siempre bella, en un delicado segundo plano a la derecha- León Gieco, Nito Mestre y el propio Porchetto para hacer esa canción que hablaba sobre un hombre bueno, si es que -todavía- queda alguien bueno en la ciudad: ¨El fantasma de Canterville¨. Fue abrumador, emocionante hasta los huesos, con toda la gente - yo también - abarrotada en el borde del escenario. Faltaba algo más? Si, volver a acercarse a la VIDA, con una canción tan buena que cura el alma. Con todo PORSUIGIECO cantando ¨Algo de paz¨ fue un cierre brillante, de antología!

Tras los saludos de rigor y luego de unos minutos, un bis fuera de programa, sin Maria Rosa ni Nito, pero con Juanse y Charly cantando nuevamente una versión algo más bluseada otra vez de ¨El fantasma de Canterville¨ fue como un deja vú de una noche única, mágica, después de todo, Facundo Arana tuvo razón....disfrutamos un concierto mágico! 

Nuestra calificación:  Excelente  ( 10 )

IIIIIIIP2016 GUSTAVO POSE.

El sueño se cumplió: PORSUIGUIECO !

PD: ¨Charly aquí, allá y en todas partes¨...

Verlo, eso. Verlo y saber que él también ya es un BEATLE, como sus Idolos, Está en el aire, en la tierra, en el fuego y en el agua. Está en nuestras vidas, en sus lentes negros, en su bigote, en las mañanas y en las noches. Está en mi corazón que latió tan fuerte que se me salía de emoción, Está en esa voz quebrada, casi inaudible y está en el Inconsciente colectivo de un pais tan contradictorio como nuestra Argentina. Verlo es mirar el Arco Iris. Verlo es como asomarse al Infierno. Verlo es verse uno mismo y comprobar que también a uno le pasan los años. Verlo es saber que en casa espera mi hijo, a quién extrañe todo el concierto. Verlo es comprender que se me llenan los ojos de lagrimas, de emoción y quizás también un poquito de tristeza, Verlo es comprender que Charly Garcia, está aquí, allá y en todas partes.

Gracias una vez más, querido viejo!